BMW M: Un vídeo desvela los M5 CSL E60, M6 CSL y M3 CSL E46 V8

Durante muchos años, los prototipos CSL fueron un secreto bien guardado, pero para celebrar el 50 aniversario, la empresa con sede en Garching saca a la luz varios modelos muy rápidos. En el último recorrido en vídeo por el garaje secreto de M, la atención se centra esta vez en los modelos con la abreviatura CSL que, lamentablemente, nunca llegaron a fabricarse en serie, pero que muestran hasta dónde podría haber llegado el viaje si se hubiera dado luz verde a la producción en serie en su día. Empezamos con un BMW M3 CSL V8 basado en la generación E46: el M3 normal de 343 CV se había mejorado a 360 CV como CSL y también se había vuelto considerablemente más ligero, pero en Garching también se le instaló un motor V8 a modo de experimento. ¿Aún sigues buscando coches segunda mano en Murcia?

 

Hay una pequeña discrepancia entre la descripción del vídeo y los anuncios que aparecen en él: el texto hablado se refiere al motor S62 del M5 (E39) de la época, mientras que los insertos se refieren a una variante especial del S65. Este último se convirtió más tarde en el motor de producción del BMW M3 (E90, E92) y entregaba 420 CV, mientras que se decía que el prototipo BMW M3 CSL V8 tenía 430 CV. Además del V8, también se instaló la caja de cambios de doble embrague de Getrag, que sustituyó a la SMG III del E46 en los E90 y E92. El exclusivo M3 CSL con ocho cilindros se reconoce por su segunda toma de aire redonda en el faldón delantero, ya que, debido a la mayor necesidad de aire del V8, ahora también era necesaria una abertura en el lado del acompañante. «

 

Justo después del M3, se presenta otro modelo destacado, sobre el que ya se especuló mucho en su momento debido al modelo especial M5 del 25 aniversario con el mismo aspecto. El BMW M5 CSL fabricado en aquella época no sólo tenía un techo de carbono y otras medidas para reducir el peso, sino sobre todo un motor fundamentalmente revisado: el fabuloso V10 S85 de altas revoluciones se aumentó a 5,7 litros de cilindrada, y el régimen máximo también se incrementó a 9.000 rpm. Esto significa que, en lugar de 507 CV, es posible alcanzar la increíble cifra de 630 CV, que supera incluso a un M5 Competition actual, y con un sonido inconfundible que, gracias al airbox de carbono, es aún más impresionante que en el BMW M5 (E60) normal.

 

El primer vídeo -pronto habrá más- concluye con el BMW M6 CSL (E63), que es todo aerodinámica: el coupé de lujo de 507 CV, que en cierto modo puede considerarse el precursor de los modelos M8 actuales, podría haber estado en la carretera con aerodinámica activa ya entonces. Lo más llamativo es sin duda el alerón trasero desplegable, pero también se realizó un splitter delantero retráctil a juego. Otro detalle interesante son los retrovisores exteriores M con doble barra, característicos de todos los modelos M actuales y cuyo diseño básico se desarrolló para el prototipo M6 CSL en el túnel de viento de la época.